El pico Alfaro es uno de los montes más emblemáticos de Almería. Su forma piramidal, junto con su relativo aislamiento, le hace destacar en el horizonte, cuando nos estamos acercando a Almería por la A92 o si miramos al norte desde las playas de Retamar y el Toyo. Su silueta ha formado parte del escenario de multitud de películas, especialmente de los spaghetti western rodados en el desierto de Tabernas.
El recorrido hasta su cima no es muy largo pero pone a prueba la resistencia física de cualquiera por sus empinados 2 kilómetros de subida. Pero el esfuerzo valdrá la pena, la vista es impresionante.